¿Qué es una endoscopia?

La endoscopia es un procedimiento médico que permite al especialista observar el interior de tu sistema digestivo superior utilizando un instrumento delgado y flexible llamado endoscopio. Este dispositivo cuenta con una cámara en su extremo, lo que permite al médico visualizar áreas como el esófago, el estómago y el duodeno en tiempo real.

La mayoría de las veces, se realiza bajo sedación, lo que significa que no sentirás dolor ni molestias durante el procedimiento. Esto hace que la experiencia sea más cómoda y que el paciente no sienta miedo al momento de iniciar el procedimiento.

¿La endoscopia es segura?

Sí, la endoscopia es considerada un procedimiento médico muy seguro. Millones de personas en todo el mundo se someten a endoscopias cada año sin complicaciones. Sin embargo, es importante que conozcas que, como en cualquier intervención, existen algunos riesgos, aunque son poco frecuentes.

¿Cuáles son los posibles riesgos?

A pesar de su alta seguridad, la endoscopia no está exenta de riesgos. Las complicaciones son raras, pero pueden incluir:

• Perforación o laceración de la pared del tubo digestivo: Esta es una complicación poco común, que en algunos casos podría requerir intervención quirúrgica.
• Reacciones a la sedación: La mayoría de las personas toleran bien la sedación, pero algunos pacientes podrían experimentar reacciones menores.
• Sangrado: Si se toman biopsias o se realizan procedimientos terapéuticos durante la endoscopia, existe un pequeño riesgo de sangrado.

Es importante destacar que los beneficios de realizar una endoscopia, como el diagnóstico temprano de enfermedades del aparato digestivo, superan ampliamente los riesgos potenciales.